La organización "narco" encabezada por tucumanos operaba desde el norte del país hasta Puerto Madryn, donde obtenía mayores ganancias en la comercialización de estupefacientes. Lo aseguró hoy el fiscal Federal de Tucumán, Pablo Camuña, que interviene en la causa.
"La organización tenía dos líneas de abastecimiento principales: una hacia el norte, más precisamente en Bolivia, por donde se bajaba pasta base y cocaína, y otra hacia el este, de donde se proveían de marihuana. Sobre todo la primera línea, de la pasta base, era muy provechosa, ya que ese grupo había desarrollado una cadena de contacto y distribución que iba hasta Puerto Madryn, donde el precio de la droga es mucho mayor", manifestó el fiscal en diálogo con Todo Noticias.
Camuña confirmó que los principales investigados del grupo son los hermanos Ricardo y Walter García, quienes hace una semana fueron detenidos en la provincia de Chaco con cerca de 100 kilos de marihuana. Además se encuentran detenidos Julio César Trayán, ex empleado del legislador oficialista Santiago "Cacho" Cano, y Daniel García, hermano de los dos primeros, consignó Télam.
Los arrestos de los hermanos García en Chaco precipitaron los allanamientos realizados en Tucumán (ocho en total) y en distintos puntos del conurbano bonaerense, entre ellos José C, Paz, donde se desmanteló un laboratorio de drogas y se secuestraron precursores químicos para producir unos 4.250 kilos de cocaína.
El laboratorio allanado, en el noroeste del conurbano, funcionaba a su vez como una fábrica dedicada a la comercialización de sulfato de cobre, y donde personal de la Policía Federal Argentina (PFA) secuestró 3.240 litros de ácido clorhídrico, 200 de sulfúrico y 30 kilos de soda cáustica.
En otro allanamiento realizado en una empresa de la localidad de Esteban Echeverría dedicada a la compra, producción y venta de sustancias químicas, y que no estaba registrada en el Registro Nacional de Precursores Químicos, se hallaron 260 litros y 600 kilos de ácido sulfúrico, y 475 litros de ácido clorhídrico.
En total se decomisaron 4.184 litros (3.724 de ácido clorhídrico y 460 de sulfúrico) y 705 kilos (105 de clorhídrico y 605 de sulfúrico) de precursores químicos, con los que se podían elaborar unos 4.250 kilos de cocaína.